Sinopsis
Un recuerdo... No, una pesadilla del pasado regresa; Los desarrolladores de la anterior entrega lo contactan para un nuevo reto.
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Halo 5 Los Guardianes del Infierno
Estaba en Youtube como todos los días, cuando me llegó la notificación de un correo de una dirección llamada “los guardianes del infierno”.
Sinceramente no le tomé demasiada importancia porque creí que era un correo spam, ya sea de broma o para robarte información; así que lo dejé pasar y fue hasta la noche cuando me picó un poco la curiosidad que decidí revisarlo.
No tardé mucho en sentir el peor escalofrío en años, inmediatamente se me erizo la piel y sentí un miedo, un terror, un pánico como no lo había experimentado desde aquella vez que jugué la supuesta copia filtrada de Halo 4.
Sabía que no lo había soñado, que no me lo había imaginado, que realmente pasó, que realmente existió ese juego, hoy lo podía confirmar; Pero en el fondo habría querido que se quedara como sólo eso, un recuerdo que apenas parece un sueño.
El correo decía que habían vigilado mi tenacidad y determinación con la anterior entrega y que no era el único, que supuestamente habría otro quien también probó el juego.
Mencionaban que me mandaron otra copia, pero esta vez de un tal Halo 5, que me volverían a contactar una vez que tuviera la copia en mis manos.
Seguía en shock, congelado, apenas y podía mover instintivamente mis manos para deslizar el correo y leerlo completo.
Hasta ese momento no habían muchas noticias del juego, el desarrollo estaba siendo muy hermético por parte de Microsoft, así que no sabía qué creer.
¿Será real? ¿Quiénes son estos guardianes? ¿Si no es real cómo saben sobre el otro juego? ¿Qué quieren de mí? Esto no podría ser una broma, nadie más lo sabía pues ni siquiera publiqué mi historia aquella vez que la escribí.
Pasaron algunos días y logré calmarme un poco pues los nervios estaban a tope, apenas podía ir a la escuela, aunque no lograba concentrarme en nada. Se cumplieron los dos día de aquello y no me llegó nada. Quizá me lo habría imaginado, pero ahí seguía el correo.
Esa tarde salieron noticias del juego “Halo 5 Guardianes”.
En cuanto vi el título del juego sentí de nuevo la piel completamente erizada, regresaron los nervios y afortunadamente era fin de semana por lo que no necesitaba salir más a la calle, así que me encerré.
Al día siguiente tocaron a la puerta muy fuerte, me descolocó una vez más y con la piel fría me acerqué a la puerta tratando de no hacer ruido para que no supieran que estaba en casa.
Se escuchó algo caer desde afuera y a la persona alejarse del lugar, esperé un par de minutos para asomarme y ver qué era.
Efectivamente, se trataba del juego.
Una sensación de vértigo se apoderó de mí, sencillamente me quedé inmóvil dentro de la casa con el juego en las manos como por 10 minutos.
A lo lejos escuché una notificación en la computadora, recobré el sentido, me acerqué a ella y verifiqué de qué se trataba.
Eran ellos, los guardianes del infierno me habían contactado de nuevo, sabían que me acababan de entregar el juego, querían que lo probara un poco y que luego entrara a un modo llamado Infinity, aunque no sabía de qué se trataba exactamente.
En general no sabía qué estaba pasando “¿por qué yo?” me preguntaba.
Resignado lo introduje en la consola y quizá no debía sorprenderme teniendo en cuenta lo pasado la última vez, pero aún así me llevé un gran susto cuando vi la pantalla de inicio del juego.
Se trataba del casco de Jhon, el visor estaba quebrado en pedazos hasta la mitad, mientras que en la otra mitad se veía su rostro. O bueno, lo que se suponía que sería su rostro pues en realidad estaba como reventado, se notaba un ojo saliente y parte del carneo y el cerebro de éste.
No lo vi por más de unos segundos, pero la imagen fue tan impactante que al día de hoy la tengo grabada en la memoria detalle por detalle.
Esta vez ni siquiera pude distinguir si se trataba de una animación o de una fotografía real.
Noté que esta vez todo se encontraba ya desbloqueado incluso sin haber entrado a nada todavía, tampoco me pedía usuario para jugarlo, ya tenía uno precargado.
El soundtrack seguía siendo escalofriante, eran lamentos, sollozos, un poco de melodía que escondía palabras apenas audibles. La calidad incluso había mejorado en todos los aspectos.
Tenía mejores audífonos, pero no creo que eso haya sido el factor que hiciera todo un poco más inmersivo.
En la pantalla principal estaba el jefe maestro de espaldas al jugador, viendo a lo lejos una ciudad destruida. Los detalles daban cada vez más miedo pues ya ni siquiera distinguía si era real o no.
Entré a la misión inicial, comenzó justo donde Halo 4 termina, con Cortana muriendo, el jefe en el espacio, difuminádose poco a poco como si de una memoria se tratara. Y efectivamente, era John en medio de una batalla recordando, la cinemática termina y comienza la pelea.
Esta vez las cosas eran más grotescas que la anterior, ahora podía ver hasta los órganos de los humanos o el covenant siendo arrojados por los aires cuando una granada explotaba cerca de alguno de ellos.
El sonido era más nítido, casi sentía que cruzaban a mi lado y es que se sentía como esos videos de audio en 3d o 5d.
Sólo podía regresar al menú terminando la misión y así lo hice.
Tenía una mezcla de sentimientos entre miedo, temor y repulsión, sobra decir que durante la misión tuve que vomitar al menos una vez porque la carga visual simplemente me superó.
Quise saber cómo terminaba la campaña, al menos la cinemática porque también se encontraba desbloqueada, así que entré a ella.
Al parecer, en escena se encontraba el nuevo espartan que habían incorporado recién que mostraron en las noticias y el tráiler. También se encontraba Cortana y el Jefe Maestro, ella trataba de curarlo con nanobots porque aparentemente estaba mal herido.
Todos peleaban contra una cosa que parecía un flood, pero sin tantar deformaciones, tenía varios brazos y era enorme, con una textura similar a la del parásito, pero éste no tenía los tentáculos en alguna parte del pecho o el rostro como sí lo tienen varias formas de infección.
Alcancé a escuchar que Cortana lo llamó algo así como “El eterno”, cosas sobre unos precursores.
Pero la cinemática se cortó en cuanto el jefe maestro se levantó de donde estaba.
No porque no hubiera más escena o video, sino porque algo me sacó al menú principal. Intenté entrar de nuevo, pero ya no me dejaba acceder ni a la cinemática ni a alguna otra misión.
Entendí que el momento había llegado, ellos o “los guardianes” querían que entrara al modo de juego Infinity.
Pensé en dejar el juego, romperlo, irme, destruir la consola; Pero no sabía si eso funcionaría, sabían dónde vivo y mudarme no era una opción en ninguna de las opciones porque sencillamente no había manera de que pudiera pagarme algo en otro lado.
¿Ir a la policía? ¿Qué les diría? Que un juego me quiere matar, que me están amenazando a través de un juego. Habrían pensado que es una ridiculez en el mejor de los casos.
Entonces entré.
Decidí terminar con esto y me uní a la partida, mientras cargaba no dejaba de preguntarme por qué estaba pasando todo esto, ¿Qué había hecho yo?
Afortunadamente el mapa era un remake de otro de Halo 2, el cual conocía a la perfección y pensé que podría sacar la ventaja. Escuché por el micrófono un par de voces, como si estuvieran hablando dos personas al mismo tiempo.
“Nos alegra que ambos se hayan unido al reto que les hemos propuesto, les deseamos suerte a ambos”
Se escuchó, pero yo me quedé confundido, creí que se refería al oponente y a mí, pero al revisar noté que era yo contra otros tres del equipo contrario.
No supe a qué se refería con “ambos” y para acabarla me tocaba pelear contra tres.
Estaba defendiéndome como podía, pero 3 vs 1 realmente era complicado, aunque esta vez no me dolía nada al morir en el juego comencé a pensar que ahora no tendría cómo salvarme, estaba perdiendo la esperanza cuando llegamos a 30 kill de ellos y 22 mías.
Entonces, cuando ya estaba aceptando mi muerte y dándome por vencido, apareció otro jugador en mi equipo. Llevaba una armadura exactamente igual a la del espartan presentado y su gamertag era Clark.
No hablaba por el chat ni por voz, sólo apareció y ayudó en la partida. Entre los dos logramos hacerles mejor frente, la tensión comenzó a subir conforme llegamos a las 40 kills pues estábamos muy parejos.
Estábamos debajo de una estructura, con un marcador empatado en 48 cuando los 3 jugadores llegaron por arriba, apenas logré reaccionar y disparé al suelo con el lanzacohetes que cargaba.
Al parecer empatamos aunque en el marcador decía que quedamos 51 vs 50 kills.
Comencé a ver borroso, como en blanco, pensé que estaba hecho, que estaba muriendo. Escuché un ligero zumbido y a alguien a través de los audífonos diciendo “gracias” apenas perceptible.
Cuando recuperé la conciencia ya era de noche, seguía tumbado en el sillón y con un dolor en el brazo izquierdo aunque no tan intenso ni tan punzante.
Por supuesto, el juego ya no estaba, tampoco evidencia de él.
Pero sí había algo en mi bandeja de mensajes de la consola. “Mensajes temporales” decía la función, una que nunca antes había visto.
El primero era de la dichosa cuenta “Clark”, en él sólo decía “gracias”.
El segundo era de “los guardianes” me felicitaban por la supuesta astucia en el momento final.
Segundos después de haber leído ambos mensajes desaparecieron.
Yo espero que ellos también lo hagan y que no regresen nunca más.
